Cuando se habla de formación, se piensa en “gastar dinero para…” No más lejos de la realidad, es un coste que hay que afrontar pero que PUEDE Y DEBE reportar grandes beneficios porque se traduce en MEJORAR lo más importante, EL RECURSO HUMANO, QUE ERES TÚ.
Siempre que te formas disminuye tu sensación de “estancamiento”. Evitas caer en la rutina de hacer siempre lo mismo: trabajo, familia, casa, en el mismo ámbito.
El aprendizaje nuevo te da el poder de descubrir nuevas áreas ocultas dónde implementar nuevas competencias y habilidades para desempeñar día a día.
¿Que tienen en común Bill Gates, Warren Buffet, Steve Jobs o Sam Walton, por poner algunos ejemplos? Seguro que piensas que es éxito, dinero, fama….puede ser, pero lo más importante, algo que todos comparten: nunca han dejado de formarse y seguir aprendiendo, ya sea de forma gratis o fuera de los canales de siempre como Jobs y Gates.
Da igual en el sector que trabajes, el puesto que tengas o si eres autónoma, el invertir en formación para mejorar tu cerebro y potenciar tu agilidad mental es clave y se vuelve transversal para alcanzar de una forma más eficaz cualquiera de tus objetivos profesionales o personales.
El desarrollo y crecimiento personal no es un proceso complicado, siempre y cuando sepas por dónde empezar y tengas al “mentor y guía” adecuado.
Tener una actitud proactiva de buscar mejorar en tus competencias participando en formaciones es el primer paso: cuando creas desafíos nuevos para ti mismo, estás evolucionando en tu carrera.
Al invertir en formación para mejorar tu área más importante del cuerpo: TU CEREBRO, te ayudará a sentir menos temor a la hora de aventurarte en áreas profesionales o personales desconocidas o que salen de tu zona de confort. Tu inversión hará que los beneficios en otras áreas se multipliquen y puedas recuperar todo lo invertido y poder ganar más para volver a invertir en más formación.
¿Cuál es el presupuesto que asignas a tu formación anual? Cuando se habla de una empresa, es fácil asignar y pensar en porcentajes de ingresos a formación técnica para los empleados para mejorar en I+D por ejemplo. Pero cuando hablamos de uno mismo… ¿Qué porcentaje de tus ingresos anuales inviertes en tu crecimiento personal? ¿En mejorar tus áreas más importantes, como es tu cerebro?
Una persona con éxito es aquella que invierte constantemente en mejorar, en descubrir nuevos desafíos, en experimentar con nuevos conocimientos que le permitan poner en práctica en su vida para evolucionar.
